7 de octubre de 2012

NO ENTIENDES




No hay respuestas hasta ahora
porque simplemente no hay preguntas;
me callo con la boca, lo que grita el corazón
y la mirada que inquieta te busca.
Mis manos son rieles de tu piel,
y otras tantas veces barcaza trémula
que quisiera varar en tu sudor perfumado.
La distancia de nuestros cuerpos
es la herida que con tu silencio se llaga,
tus ojos de playa no la ven
porque yo les enseñé a mirar hacia otro punto.
Estoy gritando en esta noche,
azuzada en una esquina de mi atormentado corazón,
tú, susurrando, seguro en algún bar
yo bebiéndome todo el alcohol
 que garantiza olvidar mi tortura.
Te he dicho te amo y no lo entiendes,
por el contrario, me tildas de dura,
inaccesible, inclemente e irónica.
Me consume tu recuerdo
cada mañana, cada tarde, cada hora.
Y tú no entiendes lo que anda en boca de todos,
lo que piensas tú y quiero yo,
lo que ambos le hemos confesado a la luna.

No hay comentarios:

Publicar un comentario